por Antonio Donnangelo
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Introducción
La viticultura tiene raíces milenarias que coinciden con el surgimiento de las primeras civilizaciones y ha tenido un impacto significativo en el desarrollo de nuestra sociedad. A lo largo de los milenios, hemos sido testigos de importantes transformaciones, tanto en lo que se refiere a las variedades de uva cultivadas como a los métodos agrícolas utilizados en su cultivo.
Hoy en día, especialmente debido al rápido cambio climático y al fuerte impacto sobre el medio ambiente, nos enfrentamos a un conjunto de retos de considerable magnitud. La protección de los viñedos y la prevención de fenómenos perjudiciales como el granizo, las heladas y las enfermedades, respetando al mismo tiempo el medio ambiente, es cada vez más difícil.
Para poder abordar estas cuestiones de la mejor manera posible, disponemos de una serie de herramientas innovadoras para ayudar a las empresas a gestionar sus viñedos y aumentar la calidad del producto final.

Fig.1: viñedo en espaldera
iDrone: mapas de variabilidad generados por drones
Mediante el análisis de imágenes visibles (RGB), multiespectrales y/o térmicas tomadas por dron, es posible reconstruir mapas temáticos del viñedo, como los mapas NDVI (Índice de Vegetación de Diferencia Normalizada), una importante herramienta utilizada para supervisar y evaluar el vigor del viñedo (Fig. 2).
Los mapas pueden utilizarse con distintos fines:
1. Racionalización de los tratamientos fitosanitarios
Los mapas de vigor permiten identificar y caracterizar la variabilidad del campo, lo que permite crear mapas de zonificación que, una vez cargados en las máquinas de tratamiento variable (TRV), permiten concentrar los tratamientos en las zonas más vigorosas y administrar menos producto en las zonas menos vigorosas, optimizando el uso del agua y los pesticidas.
2. Cosecha selectiva
Los mapas basados en el NDVI pueden ayudar a identificar distintas zonas de vigor en el campo, donde las uvas han alcanzado diferentes grados de madurez. Esto es especialmente útil cuando se cultivan distintas variedades de uva o cuando se quieren producir vinos de alta calidad. Los mapas de vigor permiten a los agricultores planificar la vendimia de forma más eficaz, recolectando las uvas en las zonas más maduras en momentos específicos, lo que mejora la calidad del producto final.
Para saber más, puede consultar el seminario web que celebramos sobre este tema ->
Zonificación de viñedos para una vendimia de precisión
3. Fertilización diferenciada
Con los mapas de vigor,la fertilización puedeadaptarse a las necesidades específicas de las vides en cada zona del viñedo. Esto permite una gestión más precisa de los nutrientes, evitando el despilfarro y mejorando la distribución en función de dónde es mayor la necesidad de nutrientes.
Cuando se hace correctamente, la fertilización diferenciada basada en mapas de vigor ayuda a optimizar el uso de fertilizantes. De hecho, distribuir menos fertilizante en las zonas ya vigorosas y, al mismo tiempo, aplicar más en las zonas menos vigorosas mejora la redistribución en el campo y reduce la variabilidad.
4. Gestión del estrés hídrico
Utilizando cámaras térmicas montadas en drones, se pueden generar mapas de temperatura para gestionar el estrés hídrico de forma consciente. Estos mapas proporcionan información sobre las temperaturas de la vid y del suelo, ayudando a identificar las zonas propensas al estrés hídrico. Estas zonas críticas pueden identificarse a tiempo para tomar medidas preventivas de programación del riego selectivo, permitiendo al viticultor tomar decisiones de riego más informadas para un uso más consciente del recurso hídrico.
El Índice de Estrés Hídrico de los Cultivos (CWSI) es un indicador utilizado en agricultura para evaluar el nivel de estrés hídrico de los cultivos. Los mapas pueden indicar las zonas del viñedo que necesitan riego o que tienen problemas de drenaje o estancamiento de agua, lo que permite una gestión específica de los recursos hídricos para mejorar el bienestar de las plantas y reducir el riesgo de una gestión incorrecta del riego.

Fig.2: Mapa de vigor de un viñedo en tres clases: bajo, medio, alto
iAgro: viticultura de precisión desde un smartphone
Las soluciones Agrobit también incluyen
iAgro
la primera aplicación
aplicación DSS móvil que permite optimizar los tratamientos fitosanitarios y crear mapas de vigor
del viñedo simplemente utilizando su smartphone.
Con iAgro,
mediante un escaneado fotográfico de una vid o de una parte de una hilera
(Fig. 3), se pueden medir rápida y objetivamente varios parámetros, en particular
la altura, el grosor y el volumen de la copa
de la planta escaneada;- el índice de área foliar(LAI);
- el área de la pared de la hoja (LWA);
- el volumen de filas de árboles (TRV);
- la dosis óptima de agua para los tratamientos fitosanitarios en cada fase fenológica.

Fig.3: Nube de puntos 3D de un tornillo generada por la aplicación iAgro
Mediante el muestreo de un número suficiente de plantas bien distribuidas en el campo (al menos 5 puntos por campo), la app genera automáticamente mapas de vigor vegetativo (índice LAI), que pueden utilizarse para optimizar la fertilización o la vendimia, y mapas de prescripción de tratamientos fitosanitarios variables y optimizados, en función de las necesidades reales del viñedo y en cada estado fenológico detectado (Fig. 4).

Fig.4: Mapa de vigor (índice LAI) en 3 clases generado por la app iAgro (en amarillo, los puntos escaneados con la app), que puede utilizarse para optimizar la fertilización y la vendimia. Las zonas más blancas corresponden a menos vigor que las más verdes, que tienen más vigor.
En función del tipo de tratamiento y del pulverizador de la granja, la app podrá crear un mapa de prescripción de la dosis correcta de agua y pesticida a distribuir (Fig. 5), respetando siempre la etiqueta del fabricante. Gracias a iAgro , es posible ahorrar hasta un 60% de agua por tratamiento y distribuir los pesticidas de la mejor forma posible, con implicaciones económicas, medioambientales y sociales positivas.

Fig.5: Mapa de prescripción de dosis de agua (l/ha) en 3 clases generado por la app iAgro (en amarillo, los puntos escaneados con la app), que puede utilizarse para la optimización de los tratamientos fitosanitarios, también cargándolo directamente en la maquinaria de tasa variable (VRT).
Estaciones meteorológicas, DSS y modelos de previsión
En el contexto de la viticultura de calidad, las estaciones meteorológicas y los modelos de previsión son herramientas insustituibles que sirven como verdaderos sistemas de apoyo a la toma de decisiones agronómicas (DSS, Decision Support System). Su importancia es crucial, ya que proporcionan datos esenciales para una gestión óptima del viñedo y para tomar decisiones fundamentadas basadas en la información del campo (suelo y microclima).
Las estaciones meteorológicas recogen datos meteorológicos en tiempo realcomo temperatura, humedad, precipitaciones, humedad de las hojas, velocidad y dirección del viento, etc., mientras que los modelos de previsión utilizan estos datos, junto con previsiones meteorológicas precisas y modelos mecanicistas basados en la biología de la vid, para devolver información útil para la toma de decisiones como:
- la fenología del cultivo (fase de desarrollo o fase de madurez);
- el riesgo de infestación por patógenos en cada momento del ciclo de cultivo;
- necesidades nutricionales e hídricas.
Un ejemplo de DSS para viticultura es GrapeDSS, una solución de Agricolus, en la que se proporciona una serie de informaciones muy útiles para el agricultor, entre ellas
- Modelo fenológico: previsión de la fenología para evaluar las necesidades del olivar en cada fase de desarrollo;
- Estimación de las necesidades de riego: para intervenir cuando sea necesario con el suministro óptimo de agua;
- Modelo de fertilización: cálculo de las necesidades totales de nitrógeno, fósforo y potasio para obtener recomendaciones sobre las dosis de abono;
- Modelos predictivos de enfermedades (Mildiu, Oidio, Botrytis) e insectos dañinos (Polilla): Los riesgos de patógenos como el mildiú velloso, el oídio y la Botrytis se predicen analizando datos microclimáticos (Fig. 6), al igual que las infestaciones de Polillapor lo que el modelo es capaz de simular el desarrollo de las generaciones a lo largo de la temporada, lo que permite al viticultor tomar medidas preventivas y tratar de forma más eficiente y eficaz.

Fig.6: Modelo de predicción de Plasmopara viticola (arriba) y Lobesia botrana (abajo)
Conclusiones
La gestión de los viñedos mediante pesticidas y fertilizantes tiene un impacto significativo en el balance económico y medioambiental de una empresa. Es importante aplicar la racionalización de las prácticas agrícolas que caracterizan la gestión del viñedo mediante herramientas que reduzcan su impacto medioambiental, hacer que la empresa sea más sostenible y competitiva en el mercado y esté en consonancia con las nuevas normativas (Green Deal europeo y Estrategia «de la granja al tenedor»).
El uso de mapas de vigor del viñedo, generados con el servicio iDrone o de forma independiente con la app iAgro, permite a los agricultores adoptar un enfoque más centrado y sostenible de la gestión del viñedo, mejorando la calidad del producto final y reduciendo el despilfarro de recursos. Esta estrategia operativa destaca por su notable solidez a la hora de delinear las características específicas del viñedo, centrándose en particular en definir la variabilidad presente de forma natural en el campo, lo que permite a la empresa consolidar una identidad cada vez más precisa y distinguirse en el mercado.
El uso de estaciones meteorológicas y modelos de previsión permite a los viticultores tomar decisiones con base científica y reducir los riesgos, mejorando la calidad y el rendimiento de la uva y, en consecuencia, la producción de vino. En el sector vitivinícola, para el que las variaciones de temperatura afectan a todos los procesos fisiológicos que rigen el desarrollo fenológico y fisiológico, la capacidad de predecir y controlar constantemente este tipo de información es fundamental para garantizar un alto control de la calidad de la uva y una productividad adecuada. Mediante el uso de estaciones meteorológicas y modelos de previsión, los viticultores pueden actuar en los momentos óptimos optimizar las operaciones de defensa y la utilización de los recursos, reducir los residuos y mejorar la eficacia de la producción.